Cuarentena (64)
22 de mayo 2020 (viernes)
Cuarentena, día 64. Viernes para los amigos, viernes de cuarentena, iniciamos la décima semana. En la cama leo un rato Lacan y me duermo. Me levanto 09.30 hs. Me baño y salgo a hacer los mandados. Voy hasta la EES3 a retirar trabajo de los alumnos. Para los que no pueden conectarse, el año está perdido. Hago la recorrida de siempre y vuelvo. Hoy el día está fresco, pero hay sol.
En la diplomatura subieron la primera actividad, no sé bien cómo será, es una actividad para realizar en grupos. Tengo un buen resumen de todo, no le voy a dar mucha importancia, esto entra, junto con las tareas administrativas de la secundaria, en -who cares?
A las 15.00 hs. tengo una videoconferencia por el tema de la efeméride del 25 de mayo con la directora del CIIE de Tres Arroyos.
Almorzamos y preparo los “cacharros” para la reunión. No dura mucho y hablo generalidades. No sé si yo no entendía la propuesta o si ellas no se ajustan al material.
Preparo un té, me acuesto un rato y escucho Lacan. Me levanto y está casi de noche. Me concentro en organizar el material y la reunión para trabajar con las docentes de Pringles. El material es el del 25 de mayo, pero reformulado (trabajé con el documento que organicé para 3º EES3). Quedamos en que nos reunimos el jueves 28 de mayo a las 16.00 hs.
Continúo con la lectura de Milanesio, un libro que no es muy difícil de interpretar. La autora presenta las iniciativas publicitarias que se adoptaron en Argentina frente a la emergencia del consumidor obrero. Las estrategias publicitarias debían tener, además de un fin exclusivamente marketinero, una función de enseñanza y educación del consumidor. Esto se ve claramente cuando se apunta al público femenino ama de casa.
Miramos el segundo capítulo de la segunda temporada de Six Feet Under y fue una nueva decepción. Me intriga saber cómo avanzará la historia, superada la primera etapa, ya no hay mucho más para interesar a los televidentes. Antes de comenzar con la serie, pensaba que la relación de la historia de la familia Fisher con las historias de cada uno de los muertos y muertas que llegan a la casa velatoria, sería más íntima y trascendental. Pero no, es una relación lineal y sencilla en que los “muertos” son la consciencia examinadora de las actitudes de Nate y Dave.
Me acuesto y sigo con Lacan.